Bacterias: indicadores de contaminación fecal
Los microorganismos
indicadores de contaminación fecal de agua actualmente en uso incluyen un grupo amplio de
bacterias que forman parte de la flora intestinal (también denominada bioma o
microbioma intestinal) de animales de sangre caliente, incluyendo al
hombre.
Estas bacterias son eliminadas diariamente por materia fecal en grandes cantidades y son fáciles de identificar y caracterizar en el laboratorio. Es muy útil su detección como indicadores de contaminación fecal pues su presencia puede señalar la existencia de agentes microbianos patógenos, que también se eliminan por materia fecal.
Seleccionando bacterias de la flora intestinal como
indicadores de contaminación fecal
Coliformes Totales: incluye una
amplia variedad de bacilos aerobios y anaerobios facultativos, Gram negativos y
no esporulantes, capaces de proliferar en presencia de concentraciones
relativamente altas de sales biliares, fermentando la lactosa y produciendo
ácido o aldehído en 24 hs a 35–37°C. Las bacterias identificadas genéricamente como Coliformes Totales
pertenecen a la familia Enterobacteriaceae e incluye mayoritariamente cuatro géneros: Escherichia,
Citrobacter, Klebsiella y Enterobacter. Escherichia coli se
encuentra exclusivamente en heces, constituyendo entre el 95 y 97% de las
especies coliformes de las heces humanas; Klebsiella aporta un 1.5%,
mientras que Citrobacter y Enterobacter aportan el 1.7%. La
mayoría de estas bacterias, una vez excretadas por materia fecal, pueden
también reproducirse en cursos de agua bajo condiciones adecuadas de materia
orgánica, temperatura, humedad y pH.
Coliformes Fecales o termotolerantes: las bacterias del grupo de las Coliformes Totales que son capaces de fermentar lactosa a 44-45 ºC se conocen como Coliformes Fecales o termotolerantes. Aproximadamente el 90-95% del grupo de las Coliformes Fecales está formado por Escherichia coli y ciertas especies de Klebsiella.
En base a lo anteriormente expresado, se considera
que como especie bacteriana individual, Escherichia coli es un buen indicador de polución fecal, debido a
que está presente en concentraciones muy altas en las heces humanas y
animales y raramente se encuentra en aguas en ausencia de contaminación fecal.
Enterococos: estas bacterias son Gram positivas y relativamente tolerantes al cloruro de sodio y al pH alcalino. Son anaerobias facultativas y pueden encontrarse aisladas, en parejas o en cadenas cortas. La concentración de enterococos intestinales en las heces humanas es, en general, alrededor de un orden de magnitud menor que la de E. coli pero este grupo presenta importantes ventajas respecto al grupo de las coliformes: tienden a sobrevivir durante más tiempo que E. coli (y en consecuencia que las coliformes totales y termotolerantes) en medios acuáticos (en particular aguas de mar por su tolerancia al cloruro de sodio), son más resistentes a la desecación y a la cloración y la mayoría de las especies no proliferan en medios acuáticos.
Calidad microbiológica de agua dulce para uso recreacional humano. Límites máximos permisibles de concentración de los indicadores bacteriológicos. Coliformes Totales, Coliformes Fecales,
Escherichia coli y enterococos
Actualmente no hay consenso a nivel internacional
respecto a los valores límites permisibles de concentración de los indicadores bacterianos que
permita establecer valores guía para asegurar la salud humana. En Argentina no
se dispone de estudios epidemiológicos locales que estimen valores de estos
indicadores bacterianos en relación al riesgo de enfermedad por exposición a
las aguas. En este contexto, la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación Argentina ha adoptado el criterio de considerar, en carácter interino, los valores guía recomendados por la
Agencia de Protección del Ambiente (EPA) de los Estados
Unidos de América (USA). Los valores límites permisibles de concentración de Coliformes Fecales,
Escherichia coli y enterococos sugeridos por la EPA, surgen de estudios
efectuados en áreas recreativas de USA, en los que se asumió una
frecuencia aceptable de gastroenteritis asociada al contacto con agua dulce de
8 episodios de diarrea cada 1000 individuos. Los valores límites sugeridos
difieren según se considere un contacto primario con el agua (natación) o
secundario (actividades acuáticas sin inmersión) y los considerados
corresponden al análisis de muestras aisladas de agua.
Para Coliformes Totales se ha considerado como
valor límite el recomendado por la Resolución 415/99 Di.P.A.S. (Dirección Provincial
de Agua y Saneamiento de la
Provincia de Córdoba), en concordancia con la Legislación de la Unión Europea.
Los valores límites máximos permisibles se muestran en la siguiente tabla:
Indicador bacteriológico
|
Valor límite (expresado en unidades
formadoras de colonias/100ml)
|
|
Contacto
primario
(natación)
|
Contacto
secundario (actividades acuáticas sin inmersión)
|
Coliformes
totales
|
5.000
|
5.000
|
Coliformes
termotolerantes
|
200
|
200
|
Escherichia
coli
|
235
|
298
|
Enterococos
|
61
|
89
|
Significado y limitaciones de los valores límites máximos permisibles establecidos para calidad microbiológica de agua
Los criterios que se utilizan para establecer los valores guía asumen la existencia de fuente ó fuentes de contaminación fecal.
La detección de valores superiores al nivel guía establecido para bacterias o
grupos de bacterias utilizados como indicadores supone la presencia de
microorganismos patógenos. Sin embargo, esta suposición está sujeta a numerosas
variables, en general relacionadas con el nivel de circulación de
microorganismos patógenos en la población. Como ejemplo, en una situación de
epidemia o de circulación sostenida del microorganismo patógeno en la población
(circulación endémica), puede ocurrir que poblacionalmente sea excretado en
mayor cantidad el microorganismo patógeno que las bacterias de la flora
intestinal. En estas situaciones, el valor del indicador establecido como
límite podría no reflejar el peligro microbiológico de las aguas.
Virus: entre los microorganismos patógenos que tienen un importante impacto en la salud humana, se destacan los virus
¿Como llegan los virus a las matrices de aguas
superficiales?
Existen más de 140 especies de virus que son
excretados, por individuos infectados, en altas concentraciones con las heces y
orinas humanas (105 – 1011 partículas virales/g de
heces), convirtiendo las aguas residuales y toda matriz acuosa en contacto con
aguas servidas, en fuente potencial de infección viral.
¿Cuales son los virus que pueden afectar la salud
humana?
Entre los virus excretados por materia
fecal/orina cabe mencionar a los virus productores de diarreas (rotavirus,
astrovirus, norovirus y adenovirus entéricos), a los enterovirus, a los virus
de las hepatitis (virus de Hepatitis A y Hepatitis E) y a los picobirnavirus y
poliomavirus. Todos estos virus se transmiten por la ingestión de aguas y
alimentos contaminados y por contacto directo con personas infectadas. En
general, la ingesta de una baja dosis viral
(1-10 dosis infectivas) puede dar lugar a la infección. Esta infección
puede resultar en una infección asintomática (sin enfermedad) ó sintomática, en
la que la enfermedad puede manifestarse leve, moderada, severa o llevar a la
muerte del individuo. El curso clínico que tome la infección depende de factores relacionados con el hospedador como la edad y estado inmunitario principalmente.
Todos los
virus antes mencionados son resistentes a las condiciones ambientales y pueden
permanecer viables (infectivos) por largos periodos de tiempo a temperatura
ambiente.
Especie animal que excreta el virus, manifestaciones clínicas,
complicaciones más frecuentes y disponibilidad de vacunas
En el agua se puede detectar genoma viral y/o virus infectivo
Detección
genómica: por técnicas de biología molecular se detecta el ácido
nucléico viral (material genético del virus). El resultado positivo se
interpreta como presencia de virus pero no informa si el virus tiene
capacidad infectiva.
Detección
de virus infectivo: por técnicas de amplificación viral en cultivos
celulares se detecta virus infectivo o viable. El resultado positivo se
interpreta como presencia de virus con capacidad de infectar a un
hospedador.
Preguntas frecuentes
¿Qué significado tiene detectar virus entéricos
en aguas recreacionales?
Encontrar virus entéricos en
aguas recreacionales indica contaminación fecal en el espejo
de agua y representa una
posible fuente de infección viral por ingesta de la misma. Sin embargo, si una
persona usa el agua para actividades acuáticas recreacionales, no
necesariamente contraerá gastroenteritis
o hepatitis. Dicho evento va a depender de la cantidad de virus con que
contacte, tiempo de exposición y lo que es más importante, de su
inmunidad. Mayores probabilidades de
enfermarse poseen en general los niños
menores de un año, ancianos y personas inmunosuprimidas, porque su organismo
estaría menos preparado para defenderse
ante el ingreso de un agente infeccioso. Sería lo mismo que ocurre cuando un
individuo sano contacta con uno enfermo. El primero tiene probabilidad de contagiarse con el agente infeccioso, lo que dependerá,
principalmente, de su estado inmune.
Por lo tanto,
ante la sospecha de que las aguas se encuentren contaminadas con virus,
deben tomarse precauciones tales como evitar bañarse en esas aguas y mucho
menos ingerirlas.
¿Cuáles son los síntomas de una
gastroenteritis y de una hepatitis viral?
Síntomas de una gastroenteritis viral:
·
Diarrea
·
Náusea y vómitos
·
Dolores abdominales
·
Pérdida de
apetito
·
Fiebre
·
Deshidratación
Síntomas de una hepatitis viral:
·
Fatiga
·
Náusea y vómitos
·
Fiebre y escalofríos
·
Dolor abdominal e hipocondrio derecho
·
Ictericia (color amarillento en piel y
membranas de los ojos o conjuntivas)
·
Pérdida de apetito
·
En algunas ocasiones, orina oscura (color café)
y heces claras.
¿Existe tratamiento ante la infección con
virus de transmisión hídrica?
Gastroenteritis virales
El tratamiento de las gastroenteritis virales es
sintomático, dirigido a prevenir ó
tratar la deshidratación secundaria al proceso. Para ello se indica el aporte
de líquidos en forma de solución rehidratante oral (sales de rehidratación
oral) que, además de corregir el déficit hídrico, asegura un aporte
adecuado de electrolitos (sales y minerales) frente a las pérdidas ocasionadas por
los vómitos y la diarrea. Los bebés deben seguir tomando leche materna o la
leche maternizada junto con los líquidos adicionales.
En los casos con
incapacidad de ingesta de líquidos por boca o incapacidad de retención de
líquidos debido a las náuseas, o al vómito, será necesario el ingreso
hospitalario y la administración de líquidos vía intravenosa y, en ocasiones,
alimentación parenteral. Los antibióticos no tienen ningún efecto sobre los
virus.
Hepatitis
Generalmente, tanto
la hepatitis A como la hepatitis E se resuelven sin tratamiento. Hasta
el momento, NO existe una terapia antiviral específica para estos virus.
Los médicos deben ofrecer terapia de apoyo. Normalmente, se aconseja al
paciente descansar, recibir una nutrición y líquidos adecuados y evitar el
alcohol. Se requiere hospitalización en los casos graves.
¿Cómo debo actuar si
sospecho que he contraído una gastroenteritis por haber contactado con aguas
superficiales de uso recreativo?
Como en cualquier caso de presentación de
signos y síntomas de alguna patología, se debe concurrir inmediatamente al
médico, hospital o centro de salud más cercano. Los profesionales interrogarán
y examinarán al paciente e impartirán el tratamiento e indicaciones
pertinentes.
¿La gastroenteritis
de origen viral es una enfermedad que sólo afecta a los niños pequeños?
No. Si bien algunos
virus afectan con mucha mayor frecuencia a los pequeños (por ejemplo rotavirus
y astrovirus),
otros, como los Norovirus, afectan a niños y adultos, por lo
tanto una gastroenteritis de origen viral no debe ser descartada si la padece
una persona adulta.
¿Existen leyes que regulen la presencia de
virus en aguas recreacionales?
Actualmente, en nuestro medio no están contemplados los estudios
virales para establecer la calidad del agua recreacional. La virología ambiental es
un área de estudio en crecimiento y en los últimos años se han
incrementado las investigaciones que intentan establecer qué virus podría ser el
marcador más adecuado para establecer la calidad virológica del agua. Aún no hay
ninguna normativa definida al respecto.
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